La posible pérdida del año escolar se presentaba como uno de los fantasmas más temidos por las familias. En un ciclo lectivo signado por la falta de presencialidad en las aulas, el trabajo en equipo entre familia y colegio se transformó en una herramienta vital para llevar adelante el proyecto pedagógico de Apdes, sin perder calidad educativa y respetando los procesos emocionales y los contextos particulares de alumnos, padres y también docentes.
3 CLAVES PARA APRENDER A LEER Y ESCRIBIR EN INGLÉS
¿Cómo se enseña a leer y escribir en inglés en nuestros Colegios bilingües?
Como adultos que hemos pasado por el sistema educativo, estamos más o menos familiarizados con el método utilizado para enseñar a leer y a escribir en nuestro idioma nativo, pero ¿se enseña igual una lengua extranjera? Desde el año 2011, en Jardín Crisol, Colegio Crisol y Colegio Bosque del Plata (Apdes La Plata), hemos desarrollado en el Área de Inglés una combinación de dos programas de conciencia fonológica: Synthetic Phonics y Jolly Phonics. Este abordaje se ajusta a nuestro proyecto bilingüe favoreciendo la alfabetización en inglés como lengua extranjera. Este proceso comienza en Sala de 5 años del Nivel Inicial y continúa a lo largo del primer ciclo. Synthetic Phonics es un método de enseñanza innovador, que ha permitido dilucidar un sistema que promueve el aprendizaje de la lectoescritura en inglés teniendo en cuenta la complejidad del idioma en su estructura. Este método surge en los países de habla inglesa para hablantes nativos con el mismo fin: facilitar el aprendizaje de la lectura y la escritura. También con este propósito surge Jolly Phonics.¿Cuáles son las 3 claves para aprender a leer y escribir en inglés en Sala de 5 y en 1° y 2° grado?
1.- La identificación de la palabra de manera espontánea: Desde el primer momento presentamos la imprenta minúscula y la vamos trabajando de distintas maneras, ampliando así su acceso al material disponible y facilitando la lectura por impacto visual. La secuencia de sonidos no sigue el orden alfabético, sino que está organizada en 7 grupos de 6 letras. Una vez que aprenden los primeros sonidos, ya pueden empezar a articularlos con otros y escribir las primeras palabras.“Al leer una palabra, reconocen las letras y combinan los sonidos respectivos; al escribir una palabra identifican los sonidos y anotan las letras correspondientes. Estas habilidades se denominan combinación y segmentación”. Sue Lloyd & Sara Wernham (2018)La combinación y segmentación (blending & segmenting) son dos habilidades centrales dentro del programa que permite a los alumnos el abordaje de los primeros pasos en la lectoescritura. 2.- La comprensión del texto: Esta forma de aprender a leer y escribir en inglés contribuye a la mejora de la comprensión de texto, como así también, su pronunciación. Las conclusiones de estas investigaciones han sido contundentes a lo largo de las últimas dos décadas principalmente. El informe del Panel Nacional de Lectura- enseñar a los niños a leer, National Reading Panel- teaching children to read ( 2000, p. 237), señala: Aprender a leer es una de las habilidades más importantes que los niños adquieren en la escuela primaria porque conforman las bases fundacionales de sus futuros logros académicos. Desde el nivel secundario y a lo largo de todo el trayecto educativo, los estudiantes dedican la mayor parte de su tiempo a la lectura y al aprendizaje de lo que encuentran en el texto. La actividad de “leer para aprender” requiere del alumno comprender y recordar las ideas principales o temas presentados en el texto (Stevens, 1991, p. 8) . En este sentido, aprender a leer y escribir en inglés en el nivel inicial y en los primeros años de la escolaridad se vuelve fundamental, pues predice el grado de comprensión que los estudiantes tendrán tanto en el nivel universitario, como así también, en sus carreras profesionales. 3.- El disfrute de la lectura: Cada semana nuestros alumnos aprenden un sonido nuevo mediante un enfoque multisensorial que incluye canciones, rimas y acciones específicas para cada uno de los 42 sonidos en inglés. Esto es, a través de una estimulación lúdica primero aprenden el sonido de los distintos fonemas. Este proceso está acompañado de una imágen que representan cada grafema y un dibujo que comienza por ese sonido. Esta forma de abordar la lectoescritura motiva el aprendizaje. En definitiva, a través del uso de la imagen, movimiento y acción, los niños aprenden a leer y escribir casi de manera natural al mismo tiempo que disfrutan del proceso. A continuación les dejamos algunas páginas de interés para que los niños puedan fortalecer su lectura y escritura en inglés: https://www.starfall.com/h/ltr-classic/ https://home.oxfordowl.co.uk/reading/free-ebooks/ Big Feet: https://www.oxfordowl.co.uk/api/digital_books/1216.html The dragon balloon: https://www.oxfordowl.co.uk/api/interactives/24318.html Nota por Silvana Pavone, Coordinadora del Área de Inglés del Colegio Crisol y Victoria María Curutchet, docente del Área de Inglés del Colegio Crisol
APLICAR LA DISCIPLINA POSITIVA EN EL JARDÍN
En Jardín Crisol estamos sumando herramientas de la Disciplina Positiva para trabajar la competencia emocional en el marco del proyecto Innovate. Por eso les presentamos una entrevista que realizamos a las expertas Manuela Caminal y Daniela Díaz Erbetta, que nos asesoran en este tema, para explicar de que se trata este nuevo desafío de aplicar la Disciplina Positiva en el jardín.
1. ¿Qué beneficios tiene en el proceso de aprendizaje utilizar disciplina positiva? Manuela Caminal: Los niños aprenden mejor cuando se sienten mejor, esto dicen los estudios de los referentes y estudiosos de la primera infancia. La base para el desarrollo de una sana autoestima, se da cuando damos a los niños oportunidades para desarrollar habilidades socioemocionales, para aprender de a poco a controlar y gestionar mejor su emociones, cuando se encuentran cómodos en un ambiente que promueve la autonomía. El cerebro del niño es más permeable al aprendizaje cuando tiene sus necesidades básicas cubiertas tanto físicas como psíquicas, cuando se siente querido y valorado. Daniela Díaz Erbetta: Como todos sabemos educar en el mundo de hoy implica una gran flexibilidad y un desafío constante. Implica enseñar no solo habilidades cognitivas sino habilidades para la vida. Educar lleva implícito el propósito de que los niños de hoy lleguen a ser adultos maduros, críticos y creativos: que sepan pensar por sí mismos, defender sus valores e ideales y que puedan cuestionar aquellas cosas que no consideran buenas. Adultos respetuosos y que sepan ponerse en el lugar de otro, con habilidades para solucionar y resolver conflictos de forma constructiva y conciliadora. La disciplina positiva se basa en el respeto mutuo, no utiliza el castigo para obtener el control, enseña, educa, prepara, entrena, modera, construye habilidades y se centra en soluciones. Enfatiza sobre el equilibrio entre firmeza, cariño y respeto tanto para los adultos como para los niños. El trabajo en equipo de familia y jardín usando las herramientas que nos brindan las Disciplina Positiva ayuda a lograr un mejor clima tanto en el hogar como en las salas. 2. ¿Qué es y qué no es la Disciplina Positiva? MC: La disciplina positiva ES:- Encontrar soluciones a largo plazo que desarrollen la autodisciplina de los alumnos.
- Comunicar con claridad sus expectativas, reglas y límites.
- Construir una relación mutuamente respetuosa.
- Enseñarles habilidades que les serán útiles para toda la vida.
- Aumentar la capacidad y la autoconfianza de los alumnos para manejar desafíos vitales.
- Enseñarles cortesía, no-violencia, empatía.
- Ser permisivos.
- Dejar que el niño haga lo que desea.
- No tener reglas, límites o expectativas.
- Una solución a corto plazo.
- Respeto mutuo.
- Conexión antes de corrección.
- Facilitar la autonomía (base de la autoestima): teniendo en cuenta la edad madurativa y posibilidades, dar siempre oportunidades de que los niños asuman responsabilidades haciendo el máximo de cosas que puedan solos.
- Aprender de los errores: brindarles la oportunidad de que se equivoquen y pongan en práctica el volver a intentar.
- Centrarse en soluciones: no buscando culpables.
- Fomentar el locus de control interno: dar lugar para la autoevaluación y el autocontrol. Dejar de lado las actividades y actitudes que estén basadas en el control excesivo. Suprimir los gritos y castigos, venganzas solapadas, premios.
- reducción de las conductas disruptivas: Un niño no se porta mal si se siente bien. Ayuda a los niños a sentir pertenencia e importancia (conexión). Decía A.Adler que el objetivo último de todos nuestros actos/decisiones es obtener sentido de pertenencia, en otras palabras sentirnos significados, queridos.
- aumenta la autoestima. Fomenta de manera clara la autonomía y esto a la vez revierte en una mayor autoestima: se centra en ofrecer al niño el mensaje de que “es capaz”.
- Pertenencia: “Si no me ves, si no me comprendes, ¿cómo podrás ayudarme?” Comprender las situaciones desde la perspectiva del niño y ser capaces de comunicar comprensión. Debemos garantizar un entorno seguro, donde cada niño, en el que día a día, sienta que lo esperan, que aporta y que es importante.
- Motivación: “Los niños necesitan motivación, como las plantas necesitan agua” (Dreikurs, R. and Soltz, V. Children: the challenge. New York: Plume Books, 1991): Sin motivación no hay autoestima saludable. Es fundamental tener en cuenta que cada persona es única. Esto nos obliga a no poner expectativas uniformes para todos los niños de una misma clase. Dar a cada planta el agua que necesita, sin comparar ni premiar resultados y alentando procesos personales y avances propios.
- Conexión antes que corrección. Es crucial establecer siempre una conexión emocional con el niño antes de que intentemos resolver algún problema. Si no conectamos antes de responder, posiblemente nos encontremos como adultos, reaccionando de manera impulsiva, con un comportamiento defensivo que nos aleja de la búsqueda de soluciones y nos acerca a la consecuencia como sanción. Para poder conectar emocionalmente con otro, es esencial poder conectar con nosotros mismos, no podemos dar lo que no tenemos. Esto es también una oportunidad para reflexionar sobre nuestra forma de relacionarnos como adultos.
- Mensaje de afecto: ser visto, atendido, cuidado, querido es sustantivo para el ser humano. Asegurar el mensaje de afecto y pertenencia requiere un tiempo. Los apuros no tienen cabida en el acompañamiento de la infancia: separar conducta de persona, sin condicionar el afecto incondicional, haga lo que haga.
- Rutinas: “Si vienes por ejemplo, a las cuatro, comenzaré a ser feliz desde las tres”. Antoine de Saint-Exupery. La infancia necesita rutinas para hacer su realidad segura y anticipable.
- Tiempo fuera Positivo: para aprender a calmarse delante de un conflicto ó un momento de estrés.
- Rueda de las opciones: para controlar los enojos.
- Tablas de Rutinas: para motivar a los niños.
- Juntas de Aula: para resolver conflictos.
ESTIMULACIÓN TEMPRANA, EDUCACIÓN A TIEMPO: 6 PILARES DE LA EDUCACIÓN INICIAL A PARTIR DE LOS 2 AÑOS
¿Cómo se trabaja en APDES la estimulación temprana entre los 2 y los 5 años de vida?
Apdes tiene como misión “desarrollar una educación de calidad que ayude a padres y madres en la educación de sus hijos e hijas” con el propósito de que cada alumno/a pueda desarrollar su propio proyecto de vida y sea feliz. Para ello y atentos al impacto que tiene la educación en los primeros años de vida, proponemos desde sala de 2 años un proyecto que pone foco en la estimulación temprana o a tiempo, apoyándose en los siguientes ejes: El juego es indispensable para el desarrollo integral de la persona. Lo consideramos una herramienta pedagógica que es medio y fin para los procesos de aprendizaje. A través del juego los niños aprenden a gestionar sus emociones y ponen en práctica roles sociales que desempeñarán siendo adultos. Un niño está jugando cuando con placer focaliza en la actividad que está haciendo más que en el resultado: su propósito es el juego y no lo que está aprendiendo. Todo lo que mencionamos da una idea resumida de lo valioso que es poder generar espacios lúdicos que desafíen al niño a jugar. Desde la sala de 2 años, el juego atraviesa transversalmente todo lo que se hace en Jardín Crisol y, a su vez, existen espacios planificados en los que la actividad lúdica se lleva a cabo con una intencionalidad.- Psicomotricidad, para establecer un contacto sano y seguro con el mundo.
- El lenguaje como medio para generar vínculos, aceptar la diversidad y generar un pensamiento crítico.
- analizar la lengua oral en sus unidades sonoras desde la más amplia hasta la unidad de fonema,
- pensar el lenguaje como un medio no sólo para comunicarse sino también adoptar una actitud metalingüística,
- conocer cómo se compone el lenguaje y cuáles son sus unidades sonoras (oración, palabra, sílaba, fonema), lo cual es una herramienta básica para poder expresarse con claridad.
- Descubrir que esta lengua oral tiene una forma escrita, lo cual se evidencia en un buen dominio de la conciencia fonológica.
- Educación integral, para que cada alumno/a descubra su propósito.
- Educación emocional desde un ambiente que utiliza las herramientas de la Disciplina Positiva.
- El sentido de pertenencia: que implica comprender las situaciones desde la perspectiva del niño. Nuestras salas se transforman en espacios seguros, donde cada cada alumno/a siente que lo esperan, que aporta y que es importante.
- La motivación para el logro de la autonomía: porque cada niño es único no ponemos expectativas uniformes. Nos enfocamos en dar a cada uno lo que necesita, sin comparar ni premiar resultados y alentando procesos personales.
- La conexión antes que la corrección: disponemos de espacios en los que priorizamos conectar con las vivencias personales de cada niño para poder comprender su conducta.
- Los mensajes de afecto: asegurar el mensaje de afecto y pertenencia requiere un tiempo (ralentización). Los apuros no tienen cabida en el acompañamiento de la infancia, menos aún en el contexto actual. Es vital distinguir entre la conducta y el niño, sin condicionar el afecto, haga lo que haga.
- Las rutinas: porque la infancia necesita rutinas para hacer su realidad anticipable y, por lo tanto, segura.
- La Fe como camino para llegar a la felicidad, a través de las pequeñas cosas del día a día.
TRABAJO EN EQUIPO: LA RECETA PARA EDUCAR EN PANDEMIA
Trabajo en equipo
“Llegar juntos es el principio. Mantenerse juntos, es el progreso. Trabajar juntos es el éxito”, Henry Ford.
Hoy, con los resultados obtenidos en las pruebas de calidad Apdes, sabemos que hemos logrado transitar de manera exitosa un recorrido que se presentaba incierto, lleno de desafíos y complejidades. Esa frase que está en nuestro ADN como institución y que tanto hemos dicho a lo largo de nuestra trayectoria: "Familia y Colegio trabajando juntos", cobra especial relevancia.
Cada uno de los actores del proceso educativo: familias, alumnos, maestros, profesores, directivos y administrativos, ha hecho un denodado esfuerzo y ha mostrado un enorme y encomiable compromiso para alcanzar las metas propuestas en marzo, cuando todavía la pandemia no había llegado con todo su rigor.
El aporte de todos, el trabajo en equipo, ha sido la clave para un ciclo lectivo con mucho aprendizaje y tanto para agradecer.
Los equipos docentes:
- Fuerte compromiso con la tarea, para seguir cumpliendo el rol con la misma integridad y eficiencia en circunstancias adversas.
- Capacidad de adaptación de cara a los nuevos desafíos, para desarrollar estrategias que permitieron seguir llevando adelante la labor docente y directiva sin menoscabar la calidad que caracteriza nuestro proyecto educativo.
- Empatía, para mantenerse cercano a pesar de la distancia física y atento a las distintas realidades que atraviesan nuestros alumnos y sus familias para consolidar el trabajo en equipo.
- Formación permanente y continua en uso de nuevas tecnologías y en nuevas metodologías pedagógicas que reclama esta nueva realidad.
Los alumnos:
- Compromiso con su propio aprendizaje. Verdaderos protagonistas que supieron sacar provecho a estas circunstancias tan especiales para crecer académica y humanamente.
- Predisposición para asistir a clases, en condiciones adversas, en espacios alternativos y atravesados por la vulnerabilidad del aislamiento y una dinámica familiar en constante redefinición.
Los padres:
- Garantes del proceso educativo en condiciones de gran complejidad. Brindando los recursos tecnológicos para convertir cada hogar en un aula.
- Férrea disposición para el trabajo en equipo con los docentes para apoyar a sus hijos/as en las distintas instancias de su aprendizaje y en su situación emocional y vincular.
- Flexibilidad y paciencia para afrontar la difícil tarea de tener en casa la escuela, el trabajo propio y nuevas rutinas, todo de un momento a otro.
El balance 2020
Antes de cerrar un año tan diferente y desafiante, nos pareció oportuno preguntar a algunas de nuestras familias, qué rescatan como positivo en este ciclo lectivo:
Lo que la pandemia nos dejó
Entre las ganancias que nos deja esta pandemia, sin lugar a dudas está la revalorización del lugar del otro tanto en el proceso educativo como en la vida, cada uno complementando y apoyando el rol del otro. Lo hemos escuchado incluso en palabras del Papa Francisco: "Nadie se salva solo".
Este confinamiento nos ha hecho comprender cabalmente los esfuerzos y los medios que cada uno plasma para que la educación se concrete y la importancia capital del trabajo en equipo.
Algunas ventajas de trabajar en equipo
- Fomenta y desarrolla la creatividad
- Incrementa la motivación
- Mejora la competencia comunicativa
- Aumenta la eficiencia
- Genera mayor sentido de pertenencia
- Refuerza la coordinación
- Favorece la complementariedad
- Incentiva el compromiso
- Optimiza el tiempo